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sábado, 4 de junio de 2011
Y ya no aguanto estas ganas de hablarte, de aguantarme la impotencia, y de tirar el orgullo a la mierda y decirte, que me está matando por dentro esto de no tenerte cerca. Pero,¿ No es así acaso como funciona lo nuestro? Te hablo, te digo que te quiero, te lo demuestro, y vos ya estás otra vez con ese ego de mierda por el cielo, creyendote lo mejor del mundo, y despreciando a cualquiera que creas menor que vos. O sino, al revés. Me hablás, me buscás, intentas quererme, intentás demostrarlo. Y ahí caigo yo rendida a vos, no puedo dejar crecer mi ego, no puedo despreciar a cualquiera, no puedo creerme más que nadie. Y me cambiás todo en un segundo, así como también cambiamos nosotros, de roles, ahi vuelvo a ser yo la ilusa enamorada que te dice todo lo que te quiere, y vos volves a ser el presumido hijo de puta que todo lo que quiere, lo tiene. Y en el hipotético caso de que me quieras, ya me tenés servida, en cambio yo me desvano los sesos pensando en si de verdad me quieres, o soy solo un capricho más que al no darte bola, lo querés. Y cuando lo tenes, ya no lo querés. Y despues las mujeres son las vuelteras, y histéricas. O el mundo ha cambiado de repente, o vos tenés cuerpo de hombre, y muchas hormonas femeninas, flaco.
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